Quiero morir, sin llevarme
la angustia de la pena
entre los pasajeros que
rompen los silencios
y traen recuerdos.
Quiero morir sin el dolor
que ha explotado la piel
y hecho de mi alma un
baul de lagrimas y penas,
un festival de incertudumbres.
Sin importar razones o verdades,
explicaciones que subyuguen
filosofías que detallen estados
de ánimos o momentos fortuitos.
Sin el adiós acostumbrado, solo.
Quiero morir, sin sentirme esclavo o amo
de la palabra pronunciada en el momento justo
Sin pensar cuanto gano o pierdo
porque los balances llevan a ignorancias.
a duda de paternales de decisiones.
Quiero morir, tan pronto
como mis ojos deseen cerrase creyendo dormir
y mis manos dejen de golpear las teclas
que van creando la composición
que se escribe en el papel... En el silencio.
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