Porque también es parte de mi vida, amanecer algunos días con un arranque lírico y ello, sin duda, me colma de regocijo como ser humano. La expresión poética como máxima expresión subjetiva, da rienda suelta a la palabra, dotándola de alas como símbolo de libertad.
que envueltas en las sombras, asfixian el respiro
y arañan con sus garras el manto de cordura.
Un halo mortecino se escurre en las rendijas
de estancias desoladas, de lágrimas marchitas,
mientras el aire silba, se vale la tristeza.
Los rincones vacíos ya no escuchan secretos
y el marco telaraña no atrapa los murmullos
porque cada lamento, es voz enmohecida.
Se vale la tristeza cuando se ha roto el hilo
que asía sutilmente la fuerza y la porfía,
dejando en entredicho la mente y su caudal
y el lecho y la naciente y la lira y su arpegio.
Se vale la tristeza, cuando oscurece el alba
envuelta por la bruma, que un sino despiadado
despliega como trampa, cual cruento cazador.
Y escuecen las entrañas la intriga y felonías,
que vilmente desgarran el tul almibarado
de un alma cenicienta, que revela al desnudo,
harapos que proclaman; ¡se vale la tristeza...!
Original de @armonia
Me complace compartir con mis amig@s estos destellos poéticos y agradecer a nuestro amigo @surpassingoogle, por invitarnos a "ulogear" con toda la fuerza de nuestro sentimiento y que cada día seamos mejores seres humanos.