En un interesante giro, como los acostumbra la gente de #Club12 con su #Reto12votos han propuesto para esta semana la palabra Elegancia:
¿Qué te sugiere el término, elegancia? ¿En qué piensas cuando escuchas la palabra? Desde @club12 pensamos en que el término puede encerrar múltiples significados, rasgos, características, atributos sobre algo o alguien.
Posiblemente sugiere trato con estilo, sencillez, calidez o simplemente libertad ¿Es posible que la elegancia se exija, se gane o se otorgue? Preguntas tan alocadas como esa pueden surgir al momento de desafiarnos con el concepto. Veamos que proponen nuestros queridos seguidores.
Normalmente, al leer el post principal del #Reto12Votos, surge en mí la duda ¿qué voy a decir? ¿cómo voy a abordar el tema? sin embargo, en esta oportunidad, para mi sorpresa, mientras mis ojos pasaban desde la E hasta la a (creo que incluso antes, ya en la c lo sabía) una imagen fugaz invadió mi mente durante un instante, como una postal manada del subconsciente y que alcancé a reconocer antes de desvanecerse. Respetando esa voluntad inicial, hablaré en esta oportunidad de un personaje, no sin antes comentar brevemente el concepto sobre el cual trata el #Reto12Votos de esta semana. De acuerdo con Wikipedia la elegancia es:
"...el atributo de ser excepcionalmente bello y sencillo. Se utiliza con frecuencia como un estándar de buen gusto, sobre todo en las áreas de la moda y la decoración."
Y es así. Normalmente utilizamos el término en decoración, vestido, moda, personas; y aunque está claro que puede utilizarse en otras áreas tan diferentes como la naturaleza o la filosofía, mi intervención abordará la elegancia desde la definición presentada. "Ser excepcionalmente bello y sencillo" puede parecer una contradicción para algunos que asocian la belleza con el lujo, la opulencia, el maquillaje excesivo y los vestidos exagerados, pero hay un punto en el que la sencillez se encuentra con la belleza y ambos valores se magnifican. Ese punto es, precisamente, la elegancia; y ¿quién representa la elegancia por antonomasia mejor que la icónica Grace Kelly?
Grace Kelly fue una actriz de cine estadounidense de la época dorada de Hollywood. Participó en apenas once películas en sus seis años de carrera y ganó el Óscar a Mejor actriz principal por su papel en The Country Girl (1954), antes de retirarse de la industria ¡con apenas 26 años! para casarse con el príncipe Raniero III de Mónaco, con quien tuvo tres hijos: Carolina, Alberto y Estefanía ¿no les suenan estos nombres?
Pero la estela de esta estrella no menguó al retirarse de las pantallas. Como princesa de Mónaco, logró que el principado se convirtiera en un punto de gran atracción turística, lo que condujo a su recuperación económica. Si Mónaco es hoy la cúspide del refinamiento, el lujo y la elegancia, es gracias a Grace Kelly, más que a su legítimo monarca. Sumemos a ello que como presidenta de la Cruz Roja, promovió una gala benéfica anual que obtuvo una gran relevancia y que ayudó a mejorar la infraestructura y las condiciones de diferentes instalaciones hospitalarias de Mónaco, demostrando ser no sólo una mujer hermosa físicamente, sino también poseedora de un altruismo digno de emular.
Y por si eso fuera poco, es un referente de la moda femenina de su época. Aún hoy se suele nombrar a Grace Kelly como un símbolo de clase, belleza, sobriedad y elegancia. La musa favorita de Alfred Hitchcock, quien la utilizó en tres de sus películas, destacaba en la pantalla por su porte, su estampa. Audrey Hepburn, Marilyn Monroe, Katharine Hepburn, Ingrid Bergman, Ava Gardner... nombren cualquiera de las grandes actrices del cine clásico de Hollywood; ninguna equipara a Grace Kelly en la forma en que siempre lograba parecer y aparecer, hermosa y a la vez sencilla. Ya fuera en un vestido de gala, en la playa en traje de baño, en ropa de dormir o en un vestido veraniego, lograba irradiar con su presencia un halo de distinción. La playa, la habitación, la calle, de pronto no parecían tan insulsas, si ella estaba en escena. ¿De qué otra actriz pueden decir lo mismo? mientras lo piensan, les dejo algunos fotogramas de dos de sus películas más famosas:
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Princesa dentro y fuera de la pantalla, reconocida actriz, ícono de la moda y del buen gusto, Grace Kelly es uno de los mitos de Hollywood, pero también uno de los grandes nombres dentro de la cultura universal del siglo XX y para mí, un sinónimo de Elegancia. Para reforzar mi comentario, acudiré a las palabras de la, también icónica, diseñadora de modas, Coco Chanel, para quien "la elegancia no consiste en ponerse un vestido nuevo” y quien dijo, respecto al término:
“Una mujer debería ser dos cosas: elegante y fabulosa”
“Adornos, ¡qué ciencia! Belleza, ¡qué arma! Modestia, ¡qué elegancia!”
“La simplicidad es la clave de la verdadera elegancia”
“Viste de forma vulgar y recordarán el vestido. Viste de forma elegante y recordarán a la mujer”
Fabulosa, modesta, sencilla y excepcionalmente hermosa, Grace Kelly representa la encarnación de una palabra, por encima de todas las demás:
E L E G A N C I A.
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